¿Ley o Gracia?
Recientemente, nuestro Director Ejecutivo, Leví, conoció a Duane Chapman. Duane es también conocido como “Perro, el cazarecompensas”, en su reality de televisión de muchas temporadas.
Siempre es divertido conocer a alguien famoso y tomarnos una fotografía para capturar el encuentro. Mientras veía la fotografía, pensé que Leví y Duane representan dos aspectos de la verdad bíblica: la ley y la gracia. Duane aprehende personas por el poder de la ley. Leví, por otro lado, hace discípulos por la proclamación del evangelio el cual habla de la gracia y la misericordia de Dios.
Nuestra salvación es por la gracia de Dios por medio de la fe (Efesios 2:8) - fe en Jesús como el Mesías, y Su obra y sacrificio expiatorios. El apóstol Juan nos dice que la Ley vino a través de Moisés; la gracia y la verdad vinieron a través de Yeshúa (Jesús) el Mesías (Juan 1:17). Estas verdades son proclamadas en las Escrituras como lo son las discusiones acerca del rol de la Ley en una era de la gracia. Tanto la ley como la gracia son regalos dados por Dios al hombre.
Después de la Biblia, el mejor libro que he leído es Los Miserables de Victor Hugo. El protagonista Jean Valjean ha pasado años en prisión por robar una hogaza de pan para los niños hambrientos de su hermana. Él también trató de escapar de la prisión. El inspector de policía, Javert, persigue a Jan Valjean para regresarlo a la prisión. Una noche, a Valjean se le permite quedarse en la casa de un obispo. Por la mañana, él toma unas piezas de plata que pertenecen a la parroquia y se las lleva. Es atrapado, pero algo inesperado sucede. Mientras Javert se prepara para arrestarlo, el obispo dice que él le dio la plata a Jean Valjean. Javert es forzado a liberarlo. La misericordia que Valjean recibe del obispo transforma su vida. De ahí en adelante, él cambia su vida, se dedica al bien y se convierte en el alcalde de un pueblo.
Javert es una figura de contraste. Él cree en la importancia de la ley. Ella se debe guardar escrupulosamente, aplicada sin misericordia, y eso en cada y toda situación. No hay lugar para la blandura o la debilidad cuando se trata de la ley. Y estas creencias lo hacen superior en su propia estima. Si nadie más venera la ley, ¡él lo hace! Nada puede desalentarlo o cambiar su resolución de que Jean Valjean debe ser capturado y regresado a prisión.
El Salmo 19:7a dice: “La Ley del Señor es perfecta”. Los versos siguientes continúan exaltando sus beneficios. Numerosas Escrituras cuentan la belleza de la ley de Dios y sus beneficios. No obstante, aunque es santa y buena, la Ley no es capaz de salvarnos. La Ley puede decirnos cómo luce una correcta manera de vivir delante de Dios pero no puede brindar el poder de actuar de acuerdo a eso. Entonces, ¿la Ley es obsoleta y por lo tanto debe ser ignorada?
Los teólogos hablan de tres usos de la Ley en una era de la gracia. La Ley arroja una luz sobre nuestra rebelión; es nuestra vara de medida y nos muestra que nos quedamos cortos ante el estándar de Dios (ver Romanos 7:7-12, por ejemplo). La Ley nos da reglas para un vivir santo el cual solamente el Espíritu de Dios consigue mientras nosotros vivimos como nuevas creaciones en el Mesías. Y la Ley, cuando es aplicada por el Espíritu, puede ser útil como un freno para el pecado social. ¡Cómo me gustaría que los Diez Mandamientos estuvieran todavía colocados en escuelas y edificios de oficinas como cuando lo eran cuando yo era joven. “No matarás” disminuiría el quitar la vida desenfrenadamente que prevalece hoy en día.
Mientras la historia de Los Miserables se desenvuelve se vuelve evidente que Jean Vlajean es el mejor hombre. Él tiene, de hecho, la oportunidad de salvar la vida de Javert. El poder de la gracia lo ha transformado más allá de un simple bien y mal.
En contraste, Javert ha gastado su vida persiguiendo a Valjean. Ahora el hombre de la ley considera la paradoja de cazar a un hombre que ha salvado su vida. Javert está en crisis y como un acto de auto castigo se ahoga él mismo en el Sena.
“La misericordia triunfa sobre el juicio” (Santiago 2:13). Nuestro Dios ha dado una Ley que es perfecta. Aun mejor, Él nos ha dado a Su Hijo. Sólo Él pudo guardar la Ley sin romper ni un solo precepto o mandamiento. Sólo Él, Aquél que es sin culpa, pudo morir por nosotros, los culpables. Ese es el mensaje que Leví y el staff de Life in Messiah proclaman. Es un mejor mensaje; es el mensaje que Yeshúa nos ha dado el poder de proclamar.
La Ley es buena pero necesitamos gracia y misericordia.
Escrito por Marc, Director de Ministerios de Campo de Life in Messiah
¿Cómo ves a Dios? ¿Como un ejecutor de la Ley o como un dador de gracia?
¿Cómo reconcilias estos dos aspectos de la ley de Dios? Por un lado, es “perfecta que restaura el alma” (Salmos 19:7); y por otro lado, la ley “no tiene poder para salvar” (Romanos 8:3, 4).
¿Cómo puedes aplicar a la vida diaria el resumen de Jesús sobre la ley, “ama a Dios y a tu prójimo”?